Es lo que tiene no tener cuidado [Libre]

por **Luna Sytweer** Dom Ene 03, 2010 8:25 pm

Había esparcido todo tipo de ingredientes imaginables por la enorme mesa que había en aquella retorcida habitación que tenía por salón, mirándo indecisa cada uno de los objetos. Aquella tarde le había dado por entrar en la biblioteca personal de sus padres (a la que le habían proihibido la entrada desde siempre) y había encontrado un libro bastante interesante, que había estado ojeándo durante el resto de la tarde, y del cual había decidido probar algo conforme había caído la noche en Halloween Town.

Tocaba cuidadosamente cada ingrediente y ojeaba la página elegida del libro, que tenía bastante aspecto de antiguo, y, en algunos tramos, peligroso, pero el hechizo que Luna intentaba llevar a cabo, al menos, tenía pinta de inofensivo. La cosa trataba de hacer una peuqeña explosión de luz, nada del otro mundo. Al fín se decidió por los ingredientes que tenía guardados desde hacía meses y que eran bastante difíciles de conseguir, pero en aquél momento pensó que no importaba, por que merecía la pena...y no sabía que pronto se arrepentiría de aquello.

Hizo el brevage con mucho cuidado y se dispuso a decir las palabras mágicas...que acabaron explotándole en la cara. No sabía en que había fallado, pero ahora, con los pelos en punta y su salón ardiendo, no le importaba lo más mínimo ese detalle.
Exasperada, gritó unas palabras mñagicas que provocaron lluvia dentro de la habitación, apagando realtivamente rápido el fuego, y, acto seguido, Luna decidió que, o salía de allí, o acabaría explotando la casa entera con su furia.

Ni siquiera se molestó en arreglarse el pelo, salió de casa y cerró la puerta con ímpetu, decidida a perderse entre las calles y la noche de Halloween Town, paseando por éstas, que aparentemente estaban solitarias.

por **Marc Hollow** Dom Ene 03, 2010 11:08 pm

Después de pasar casi toda la tarde en la playa de Rock Bleach, lugar en el que sin duda, aun teniendo en cuenta su continuo vagar por los lugares de la ciudad y sus alrededores, se podía decir que era en el que mayor tiempo dedicaba su existencia, se había decido a dar una pequeña vuelta por la ciudad. A diferencia de una ciudad normal, en Halloween Town no transitaba el mayor número de gente por el día, sino todo lo contrario, por la noche, cuando las criaturas que no eran consideradas tan normales tenían la costumbre de salir y dar a relucir sus mágicas dotes. Aquella noche no era diferente y podía ver a cada esquina un ser que sin duda se trataba a uno que difería a un humano con ganas de trasnochar, aunque supuso, que alguno siempre se dejaba a ver por ahí y que con suerte, salía vivo. Fue entonces, sin saber porque, que aquel pensamiento le hizo recordar a la hada Nyx, malévola como ninguna otra y que quizás, ella no sería capaz de dejar la oportunidad de llevarse un vivo a casa, lo que hiciera con él, aunque curioso, no le gustaba imaginárselo.

Se adentró en uno de los tantos callejones que componían las laberínticas calles de la ciudad, buscando ocultarse un momento de ojos curiosos que por ahí rondaban. Levitando, como siempre, pues esa se trataba de la característica principal de ser un fantasma, nunca caminar, simplemente el suelo no lo sentía, se acercó cuando pudo al pavimento sin llegar a tocarlo. Pronto empezó a sentir más peso sobre él, sin duda alguna lo que había sido una parte incorpórea de su cuerpo empezaba a tornarse de carne y hueso, y lo que conllevaba con ello, aquel cambio de peso tan extraño como grande que se adueñaba de él. Atraído por la fuerza de la gravedad termino de llegar al suelo, sonriendo de medio lado, estirando sus pies con gracia. – Esto está mejor.. si señor – Murmuró animado dispuesto a disfrutar aquel ratito que semejaba a la vida. Se detuvo un momento a ver su ropa, estaba completamente mojado, pero a diferencia que siempre, esta vez sentía la humedad de las prendas pegadas a su cuerpo, además de aquella herida de sangre que eternamente se mantenía intacta en su torso – Creo que necesito otra ropa – Dijo en voz alta hablando para si mismo, levantando la mirada dispuesto a buscar una nueva vestimenta.

por **Luna Sytweer** Dom Ene 03, 2010 11:37 pm

Conforme caminaba alejándose de lo que en aquél momento era su desastrosa casa, colores y apariencias de las diferentes criaturas de Halloween Town se iban mostrando poco a poco, cada vez más notorias en la noche. No le pareció extraño pero tampoco era algo a lo que estaba acostumbrada. Su introversión la había obligado casi siempre a estar dentro de casa, y no relacionarse con sus vecinos, seres habitantes del pueblo. Pero aquella noche le daba igual aquello. Imaginó que pasaría desapercibida a menos que su patosidad la pillara desprevenida de nuevo y le volviera a jugar una mala pasada. Empezaba a preguntarse seriamente si lo conveniente sería ponerse un hechizo de protección ella misma. Desde que sus padres había fallecida-desaparecido o lo que fuera que habían hecho, su vida se había convertido en un verdadero desastre, a pesar de que ya lo fuera cuando ellos aún estaban con Luna.

En su mente se arremolinaban pensamientos de este tipo conforme caminaba, sin rumbo fijo, y ya casi inconsciente de los demás seres que también se hayaban fuera de sus casas en aquellos momentos, al menos, sin darse cuenta hasta que se topó con una cara que conocía. Marc caminaba hacia el lado contrario al de Luna, acercándose a ella poco a poco. Sus pensamientos se dispersaron y la chica levantó la mano para saludarle. Hacía algún tiempo que no lo veía y en su mente se dibujó una sonrisa ancha. <<Sigue tan guapo cómo siempre...aunque tampoco es que pueda cambiar mucho>>, pensó para sí misma, cuando estuvieron cerca del todo, se paró para hablar con él.

-¡Marc!.-exclamó, con las mejillas algo rojas. No podía evitar que esto pasara cada vez que le veía, aunque ya estaba acostumbrada a él y se habían hecho amigos, el pensar lo guapo que era le producía aquella rojez.-cuanto tiempo.

por **Marc Hollow** Lun Ene 04, 2010 12:18 am

Caminaba a un caminar lento y despreocupado, disfrutando cada paso que daba mientras seguía sin rumbo a la espera de pillar a alguien que pudiera proporcionarle unas vestimentas, lo que le hizo pensar que no estaría nada mal tener un rincón o una pequeña casa para él donde tener todas esas pequeñas cosas que cuando se convertía en un humano le resultaban necesarias, ir siempre mojado y con la ropa rota no era uno de sus estilos preferidos, aunque fuera el que más abundara en él. Frente a él empezaba a distinguirse una pequeña figura que se le antojaba conocida, pudiendo descubrir que se trataba de la brujita Luna cuando estuvo más cerca de ella. Sonrió sin poder evitar, una buena compañía sin duda la que había tenido la suerte de toparse. Observó con gracia como ella le saludaba con su mano y él, imitándola, levantó a medias la suya para agitarla muy levemente como respuesta. No pudo evitar fijarse en su peinado, negruzco y desordenado, al igual que las pintas que presentaba, como si algo le hubiera explotado – Valla, si querías sorprenderme, lo has hecho – Le dijo riendo suavemente y con la diversión incrustada en su rostro.

- Bonito estilo – Continuó comentando pero esta vez como última referencia a como se encontraba para sonreírle abiertamente, la verdad es que ella tenía razón, asía tiempo que no habían tenido la oportunidad de encontrarse ni de charlar un rato, lo que aún hacía más agradable aquel encontronazo que espera fuera la mar de entretenido. – Espero que esa no sea tu forma de saludar a un viejo conocido – Terminó, dejando relucir en su rostro una pequeña sonrisa de medio lado.

por **Luna Sytweer** Lun Ene 04, 2010 1:03 am

Cuando Marc le dijo que le había sorprendido fue cuando Luna se dio cuenta de las pintas que llevaba en aquél momento. Con el corto paseo y los distraida que era se había olvidado completamente del aspecto churruscado y, seguramente, el olor que haría a pollo quemado en aquellos momentos. Se llevó una mano a la frente, bastante avergonzada por su aspecto. Aunque no solía vestir cómo una persona normal y tenía sus toques estilísticos algo extraños, no le iba aquello de ir de mujer salvada por los pelos (nunca mejor dicho) del incendio de su casa.

-Oh...perdona, te abrazaría, pero con este aspecto...-su rojez había aumentado considerablemente, y entre el nerviosismo pronunció un pequeño hechizo que le dejó el pelo, a pesar de igual de ennegrecido, liso, y eso ya era, al menos, un adelanto. Por lo referente a la ropa, prefirió pasarse las manos en forma de plumero, en vez de más truquillos. Decidió que los hechizos se habían acabado por aquella noche, puesto que casi se había cargado el salón por culpa de uno. Decidió que tenía que explicarselo a Marc, o, almenos, hacerle un pequeño resumen.-He tendio un pequeño problemita con una poción, cómo puedes comprobar. No quiero mancharte...y, ains, te invitaría a mi casa para charlar un rato, pero está patas para arriba.

En aquél momento se le ocurrió pensar cómo arreglaría todo aquél caos, y lo más importante, cómo recuperaría todos sus ingredientes quemados. Le sonrió a Marc, con la misma rojez de antes, que poco a poco empezaba a extinguirse, grácias a Dios.

por **Marc Hollow** Lun Ene 04, 2010 1:47 am

No borró su sonrisa de medio lado ante la escusa que le daba la joven bruja, y de la que, en cierto modo, le daba la razón, seguramente no quedaría muy bonito tintado de negro aunque, si teníamos en cuenta que eso se le iba a quitar cuando volviera a ser fantasma, poca importancia tenia. – No te preocupes.. – Le dijo con un pequeño ademán de manos restándole importancia – Yo te hubiera dejado empapadita – Comentó con gracia mientras cogía la camisa estirándosela levemente aprovechándola para separarla de su cuerpo, pues esa sensación poco le gustaba, y de paso, mostrándoselo.

Rió suavemente ante el pequeño relato de la joven, observando también como había conseguido que sus cabellos descansaran en su espalda ya lisos y aun con aquel tinte negruzco, lo que, como siempre, le pareció curioso. Aquel mundo de la magia controlada le parecía interesante y muy curioso, conocía a pocas brujas y siempre salía fascinado de lo que veía. Sin embargo parecía que Luna no era tan experimentada, o al contrario, experimentaba tanto lo desconocido que lograba poner en peligro su propia casa, lo que le recordaba que, efectivamente, como ella misma había nombrado, tenía que invitarle. – Espero algún dia tener el privilegio de ser espectador de tus.. experimentos – Comentó con gracia para retroceder unos pasos y estirar ambas manos de forma horizontal - ¿Crees que puedes hacer algo por mi? – Preguntó refiriéndose a una mejora de vestuario, sin duda, la necesitaba.

por **Luna Sytweer** Lun Ene 04, 2010 2:24 am

Cuando el chico puso los brazos en horizontal, Luna lo miró con atención. Tras haber visto cómo se retiraba la camiseta empapada que llevaba con algo de asco, sabía perfectamente lo que pretendía decirle. Le sonrió haciéndole entender que no había problema, y volvió a concentrarse en su cuerpo nuevamente. Fuera de ser consciente de que lo que estaba mirando descaradamente era el cuerpo de su amigo, decidió que se concentraría mejor imaginando que era uno de aquellos maniquies con los que aprendió a perfeccionar su hechizo de cambiar ropa, por que en una ocasión había estado apunto de ahogarse con las manos de un jersei al que ella denominó asesino y que no volvió a invocar más, pero aquello pasó hacía muchos años y aquél hechizo era casi tan fácil cómo lo era el respirar.

Siguió mirando su cuerpo con atención. No tenía muy claro que estilo de ropa ponerle, así que pensó en algo más o menos básico, y, si no le gustaba, siempre podría cambiarlo de nuevo.
Antes de pronunciar las palabras adecuadas, apartó un momento la vista de su cuerpo y volvió a mirarle al rostro para contestarle la pregunta que le había hecho antes de preguntarle si podía hacer algo con su vestuario.
-Bueno...cómo puedes comprobar por mi aspecto, mis experimentos no son agradables.-Le sonrió.

Volvió a mirar su cuerpo pero esta vez, sin pensarselo tanto, pronunció las palabras correctas y dió un chasquido de dedos. Llas ropas mojadas de Marc se cambiaron al instante por una camiseta negra y unos vaqueros, ni anchos, ni estrechos, y unas deportivas negras también.
-No sabía que ponerte...-se rió, aquella frase había sonado algo rara.-Pero si no te gusta, dime que tengo que cambiarte.-Luna se pasó una mano por su pelo liso pero chamuscado.

por **Marc Hollow** Lun Ene 04, 2010 8:20 am

Sonrió al ver que Luna hacía lo propio indicándole, supuso, que le consentiría el capricho de un cambio de muda. Dejó la horizontalidad de sus brazos mientras no le pasaba desapercibida la mirada de la joven bruja sobre su cuerpo, ignorando si el motivo de ella era un detallado examen de las medidas que llevaba o si se trataba de que le gustaba lo que veía, las dos opciones totalmente aceptables y que no dudaba en satisfacer el fantasma de joven apariencia. Se dejó observar, con cierta gracia, dedicándose a ver las cambiantes expresiones en el rostro de a chica que ahora se mantenía concentrado, quería hacer un comentario gracioso de lo que le parecía la escena, pero viendo el ensimismamiento de ella prefirió no molestarla. Al escuchar el comentario de Luna sobre lo desagradable que podían ser sus experimentos no pudo evitar reír levemente – No creo que sufra las consecuencias – Comentó con gracia, el ser un no vivo tenía sus ventajas, morir no podrías volver a morir, y si a eso se le añadía que era incorpóreo, no podía afectarle el más retorcido peligro, o al menos eso comprobó cuando, al principio de su vida como tal ser, intentó que lo atropellara un caballo.

Cuando se quiso dar cuenta, ya no tenía la carga de soportar aquellos ropajes mojado, en cambio ahora llevaba un sencillo estilo compuesto simplemente por una camisa negra, vaqueros y deportivas de igual color – Genial, que gusto da cambiarse de ropa – Murmuró dándose un rápido vistazo acompañado, aun sin saber el motivo de gracia de la chica, de una pequeña risa. Metió un poco el vientre y se llevó la mano a los pantalones, estirándolos un poquito para ver por qué se sentía tan incómodo – Aunque en ocasiones me gusta llevar ropa interior – Comentó como quien no quería la cosa, riendo de una forma bastante abierta por aquella dejadez, pero esperando que la chica no lo confundiera con la burla hacia su persona.

OFF: Siento eso último ángel, no pude evitarlo x'DDDDDDDD

por **Luna Sytweer** Lun Ene 04, 2010 8:51 pm

La mano que se deslizaba lentamente por su larga y ahora lisa cabellera paró en seco a mitad de camino cuando se dió cuenta del gran fallo cometido tras la inspección de su amigo. La rojez que ya hacía minutos que había desaparecidovolvió a instalarse en el mismo lugar de antes, llevándole a tirarse del primer mecón de pelo que la mano que estaba posada en éste pilló. Y menudo fallo. A los maniquíes no tenía que ponerles ropa interior, por que no la necesitaban. Pero Marc era otra cosa, Mark, que a pesar de fantasma, era hombre y en aquél momento corpóreo sí que tenía esa necesidad. Se llevo automaticamente la mano que le quedaba libre a la boca, bastante avergonzada.

-¡oh! Lo siento, Marc.-tras esto, y ya sin pronunciar palabras, se concentró en sus partes, cerrando los ojos en vez de clavar su mirada en el sitio, ya que se sentiría incómoda y pensó que el chico también en parte, y volvió a chasquear los dedos, esperándo no hacerle daño. Abrió un ojo al no escuchar ruido alguno y contempló la cara impasible de Marc. Sonrió aliviada, no había fallado, al parecer, o tal vez no había hecho efecto. Removió los dedos de los piés en sus botas, que antes eran verdes, y ahora, cómo el resto de su piel y ropa, tenía un tono negrizo causado por la explosión, y abrió el otro ojo, mirando a Marc.

-Ha...¿ha hecho efecto?.-preguntó, algo avergonzada todavía. Alomejor es que simplemente seguía sin ropa interior y por eso no había habido muestra alguna de quejas por parte del chico.

por **Marc Hollow** Lun Ene 04, 2010 9:17 pm

Pronto aquella risa empezó a ser controlada, volviendo a serenarse al darse cuenta que la chica no se lo había tomado con tanta gracia como él pero si con bastante vergüenza, o al menos así lo demostraba su notorio sonrojado rostro y su pequeña expresión acompañada de una disculpa – No pasa nada – Le aseguró sonriéndole mientras se dedicaba a observarla aún con aquel atisbo de diversión incrustado en él. La chica cerraba sus párpados, hecho que le extrañó si tenía en cuenta que antes lo había hecho perfectamente bien con solo una mirada a su complexión, fue entonces cuando calló en la cuenta de que quizás se trataba de lo que tenía que mirar para poder ponerle cómodo, lo que le hizo reír para sí mismo.

Casi inmediatamente sintió como, para su agradecimiento, a Luna le había salido al igual que la ropa a la perfección, sin embargo solo se mantuvo observándola con una sonrisa de medio lado en su rostro a la espera de que volviera al mundo. Y así lo hizo. - ¿Quieres comprobarlo? – Le respondió con otra pregunta a su avergonzada cuestión, mas a sabiendas de que quizás la estaba cohibiendo demasiado, prefirió dejar aquel juego – Es broma. Ahora si estoy perfecto – Le dijo sonriendo mientras se acercaba a ella, pues ahora que no estaba mojado y que, como había comentado antes, no le preocuparía macharse un poco, buscaba un saludo más afectuoso por su parte – Ven aquí – Le dijo con gracia mientras le abrazaba rodeándola por la cintura con sus brazos, la verdad, hacía tiempo que no la veía, no pensaba quedarse con un mero ademán de manos.

por **Luna Sytweer** Lun Ene 04, 2010 10:24 pm

Suspiró tranquila cuando le hizo aquella pregunta, aunque eso la puso un poco nerviosa, pero se relajó en cuanto Marc volvió a hablar y le dijo que estaba perfecto. Bueno, para ser la primera vez que vestía a un hombre de verdad con ropa interior no había estado mal, por lo menos no había explotado nada. Dejó caer la mano que tenía en el pelo y le sonrió al chicomientras este se le acercaba.
-Trabajo hecho.-murmuró entre dientes, antes de corresponder el abrazo. Almenos el conjunto que le había proporcionado no le daría muchos problemas a la hora de mancharse, ya que era negro, los manchurrones sólo le serían visibles en los vaqueros. Lugo se aferró a él cómo una garrapata teniendo en cuenta la poca altura de la que Luna poseía. Total, ya que se iba a manchar, no perdía nada por abrazarle de verdad, teniendo en cuenta que hacía tiempo que no se veían y que no tenía ni idea de cuando volvería a tener la oportunidad de disfrutar de su compañía.

Cuando se separaron Luna le sonrió ampliamente, mirándo a los ojos del chico.
-¿Qué has estado haciendo todo este tiempo?.-le preguntó curiosa, le encantaba escuchar todo tipo de historias y los fantasmas le parecían seres muy curiosos. Se preguntó a sí misma si ella se quedaría atrapada en un fantasma por dejarse algún asunto pendiente.

por **Marc Hollow** Miér Ene 06, 2010 11:08 pm

Notó como la chica se relajaba notablemente por lo que su pequeño suspiro dio a entender. Siguió observándola, sonriendo con sus labios por unos minutos tangibles curvados levemente, hasta que Luna correspondió a su abrazo estrechándose contra él. Por unos instantes le sorpendió la gran efusividad con la que la joven se aferraba a él, pero supuso que se debía a las escasas ocasiones en las que se veían, y mucho menos en unas condiciones "físicas". Finalmente estrechó un poco más el cerco de sus brazos durante unos instantes antes de separarse nuevamente de ella, retrocediendo un par de pasos para no incomodarla.

Volvió a fijar la mirada de sus orbes oscuros en el rostro de la bruja al tiempo que una sonrisa volvía a aparecer en su rostro pálido, ahora con un gesto pensativo. Ciertamente no había hecho nada interesante últimamente. Llevaba décadas sin hacer algo realmente interesante.
-Lo de siempre, atravesar paredes y poco más-le respondió con un tono burlón y un ligero brillo de diversión en la mirada-¿Y tú? ¿Has vestido a muchos fantasmas últimamente?

por **Luna Sytweer** Jue Ene 07, 2010 9:30 pm

Los ojos de Luna lo observaron atentamente entre las penumbras de la callejuela que la noche de Halloween Town proyectaba, atenta de lo que le chico le decía. Tampoco es que le costara mucho seguir el hilo de la conversación por que la calle no estaba muy transitada, seguramente los seres del lúgar habían preferido otro tipo de sitios para pararse a charlar que en medio de la calle, teniendo en cuentra la excentricidad de algunas criaturas de allí. Empezó a retorcerse las mangas de su camiseta (que antes era de varios colores), casi al mismo tiempo que Marc le contestaba. Sonrió suavemente ante su respuesta, preguntándose si en el nuevo tesoro que había encontrado en su casa habría algún libro con un hechizo capaz de hacer atravesar las paredes sin la necesidad de ser un fantasma, y se apuntó mentalmente la idea para estudiarla más tarde. Se rió un poco cuando Marc le hizo la segunda pregunta.

-Ah, no, no.-contestó tras una pequeña risita, retorciendo aún las mangas.-de momento eres el único y el primero.-soltó sus mangas y giró sus ojos para pensar. Tampoco es que ella hiciera muchas cosas interesantes durante cada día de su vida, a pesar de que en el caso contrario podía tardar bastante en contarle de todo a Marc, teniendo en cuenta la poca frecuéncia con la que se veían.
-Lo único interesante que he hecho hs sido explotar mi casa, cómo ya sabes. Pero ha sido una explosión desinteresada.-bromeó.

por **Marc Hollow** Vie Ene 08, 2010 4:28 pm

Observaba con gracia a Luna jugar con las mangas de su camiseta, un gesto inentendible para él pero que simplemente le causaba diversión. Se miró los pantalones dándose cuenta de un pequeño rastro de aquel tinte negro que, en esos momentos, era característico de la bruja, con la mano le dio varios golpes sacudiéndolo con la intención de quitar la mancha, consiguiendo que el resultado fuera una mancha más grande. Prefirió dejarla así, al fin y al cabo tampoco se le iba a notar, suponía, estando de noche.

- Eso es bueno – Dijo riendo levemente ante la contesta de la joven bruja, por supuesto, su risa se debía a sus pensamiento, opinando en ellos que esa misma respuesta en un contexto algo diferente, del que no le importaría ser partícipe, hubiera sido aun mejor, aunque claro, egoísta. Agitó levemente la cabeza como si de esa manera quisiera cambiar de tema en su mente, un acto estúpido pero eficaz. Escuchó sus palabras, parecía que ninguno de los dos había conseguido hacer mucho interesante en todo aquel tiempo sin verle, o quizás no fuera que no hubieran hecho nada, mas seguramente no era tan emocionante o entretenido como para contarlo. Sonrió por aquel hecho, intentaba imaginarse su casa chamuscada y patas arriba, mas simplemente se imaginaba cualquier casa en esas condiciones, al fin y al cabo no había tenido la oportunidad de dar una ojeada por esos lugares – Bueno, ya era hora de pensar en una remodelación – Le dijo con gracia, un comentario quizás sin sentido, para acercarse nuevamente a ella - ¿Damos una vuelta por la ciudad? – Preguntó, simplemente para no quedar en medio de aquella callejuela, quería, quizás, un poco más de intimidad por algún lugar más desierto o, por el contrario, ir a algún lugar transitado y en el que poder divertirse, todo fuera mientras pasara aquel momento como humano en compañía de la joven.

por **Luna Sytweer** Lun Ene 11, 2010 7:19 pm

Luna pensó inocentemente en las palabras del chico, dándole, en parte, la razón, pero interiomente. Desde la muerte de sus padres Luna no había movido ni úna sola mota de polvo (por exagerarle de alguna forma) de su casa. Y no es que el pensar en una remodelación le hiciera sentirse sola, simplemente no lo había visto necesario ni tampoco se le había pasado por la cabeza, entre otras cosas por que la picia de aquella noche había sido la primera estando sola, y desde hacía bastante tiempo. Se limitó a sonreir a Marc y encojerse de hombros. Ante la pregunta de éste y el acercamiento, se sonrojó un poco, pero no lo suficiente cómo para notársele en exceso.

-¿No te gustan las calles oscuras?.-le susurró en forma de broma, riéndose ligeramente.-Claro, vamos.-volvió a decir, segundos más tarde de la primera pregunta. Se puso a caminar en cuanto comprobó que su amigo se movía hacia delante. Luna lo seguía de bastante cerca. Pronto salieron a una zona un poco más iluminada que la que estaban pero que no disfrutaba tampoco de mucho tránsito, precisamente. La bruja alternava la mirada desde las calles hasta su amigo, reparando en que al final le había manchado el pantalón, no dijo nada, por que la mancha tampoco era alarmante.
-¿Quieres ir a algún sitio en especial?.-le preguntó al pcoo de estar caminando. No es que quisiera deshacerse de él, es más, le agradaba bastante su compañía, ni tampoco es que ella tuviera ganas de parar en algún lugar, si no que simplemente se había hecho un silencio entre ambos, que, a pesar de no ser incómodo, a Luna no solían gustarle.

por **Marc Hollow** Miér Ene 13, 2010 6:44 pm

Sonrió de medio lado atento a Luna mientras esta se mantenía en silencio, sumida en sus pensamientos, supuso. Mas su sonrisa se vio acrecentada cuando la chica le preguntó aquello entre susurros, que aunque le pareció extraña su curiosidad no pudo evitar reír levemente – Según para qué – Le contestó satisfecho por su respuesta dejando que la chica utilizara su imaginación, claro está que en la mente del fantasma la idea estaba más que clara. Animó el paso para disponerse a salir de la callejuela a sabiendas de que Luna le seguía el paso, aunque gustara más de que estuviera a su lado, no dijo nada por ello.

Al salir del callejón el panorama que se les presentaba no era muy diferente, solitario, oscuro y aburrido. Notaba que entre ambos se había sumido un extraño silencio, aunque eso no molestara en absoluto a Marc, quien disfrutaba de los momentos de silencio como pocos, pues en su larga existencia era mucho el tiempo que pasaba a solas, sin embargo, estando acompañado, siempre se le antojaba raro e incómodo no hablar. Se detuvo momentáneamente para que ambos caminaran uno al lado del otro, fijándose en como Luna alternaba la mirada de él a el lugar, mas como no entendió el porqué, decidió dejarlo pasar - ¿Te moleta el frio, Luna? – Preguntó riendo para sí mismo, para después escuchar como ella inmediatamente le preguntaba sobre algún lugar en concreto al cual ir. – Sorpréndeme, vallamos a tu rincón favorito – Le propuso, a sabiendas de que el rincón favorito de él no era precisamente el más agradable – Al menos que sea tu casa – Comentó arrugando el ceño pensando que después de una buena explosión no estaría muy habitable – Aunque la idea tampoco es mala – Terminó riendo levemente, agradeciendo al igual que muchas veces de que su compañero no supiera leer mentes.

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Es lo que tiene no tener cuidado [Libre]

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