Momentos para recordar [LIBRE]

por **Marc Hollow** Lun Dic 28, 2009 9:06 pm

Marco, o al menos lo poco que había quedado de él después de perder la vida, pues ahora solo era una leve sombra de lo que en antaño era, se encontraba erguido sobre uno de las tantas rocas distorsionadas que abundaban en las profundidades de aquella peligrosa playa que no destacaba precisamente por ser agradable e ideal a la vista de los adolescentes ciudadanos. Sin embargo, él no era un adolescente, aunque su apariencia se empeñara en contradecir tal hecho, y tampoco se le podría considerar un ciudadano, simplemente era un fantasma que vagaba por aquellos lugares, por lo que aquella playa, llena de recuerdos, le era un sitio que nunca dejaría de visitar, sin saber exactamente qué es lo que sentía al ver la causa de su actual estado.

P.D: Yo abriendo un post... que bajo he caido..

por **Bell Phoenyx** Lun Dic 28, 2009 9:15 pm

En la naturaleza de Bell no estaba dejar que un día gris y aburrido fastidiara su habitual buen humor, por lo que la joven había decidido dar un paseo, o más bien un vuelo, por la playa.
Todavía no sabía a ciencia cierta qué hacía en la playa rocosa, pero suponía que la causa tendría bastante que ver con la gran cantidad de gente que, a pesar del cielo que amenazaba lluvia, había decidido bajar a la otra playa, sin duda mucho más agradable que ésta.

Por eso la joven levitaba a unos centímetros del suelo para evitar caerse debido a las rocas resbaladizas, mientras silbaba una canción por lo bajo, admirando la manera en que las olas rompían contra los acantilados creando una espuma blanca que volvía más peligroso todavía el terreno.

En contra de lo que esparaba pudo detectar una silueta a unos metros más allá. ¿Quién más estaría allí en un día como ese? Se acercó un poco hasta distinguir la figura de Marco, el particular fantasma acosador de su mejor amiga. Se podía decir que no tenían una muy buena relación, aunque era lógico si teníamos en cuenta que el chico, por algún motivo que ella no sabía, quería matar a su amiga.

OFF: Eso es porque soy yo Cool

por **Marc Hollow** Lun Dic 28, 2009 9:43 pm

Levantó su mano derecha de forma horizontal contra el mar, en un intento vano de sentir la brisa marina que surcaba arremolinada por el ambiente, sin embargo el viento no se detenía a recorrer con su característica curiosidad aquello que le impedía el paso, simplemente pasaba de largo sin tomarle en cuenta. Quitó su vista de aquella extremidad, cual ahora yacía a uno de sus costados, para darse cuenta de una segunda persona en el lugar, aunque tras ver detenidamente a aquella intrusa para él en esos momentos pudo descubrir que se trataba de una hada bastante conocida. Se mantuvo un rato observándola, sin mediar palabra alguna o ofrecerle un gesto de bienvenida, sin embargo pronto una sonrisa de medio lado que resultaba irónica surcó su rostro, cual se había mantenido apacible por aquel rato que llevaba a solas.

Se desvaneció poco a poco ante los ojos de Bell – Un hada madrina – Dijo con cierto tono de gracia mientras aparecía metros mas arriba de su antigua posición, situándose a su lado - ¿Mi atrayente presencia te ha traído hacia aquí? – Preguntó con curiosidad, no dejando atrás para nada su costumbre de nombrarse, su indudable carisma se lo impedía.

P.D: Ya vez.. lo que tiene que hacer uno por la madre de su hijo.. u_u

por **Bell Phoenyx** Lun Dic 28, 2009 10:13 pm

Bell se mantuvo en silencio y alejada del fantasma durante unos minutos, observando como éste extendía su mano hacia el mar en un gesto al que la chica era completamente incapaz de encontrarle la más mínima lógica.
No sabía qué hacer con él. Podía dar media vuelta y largarse de allí sin ser vista o podía pasar a su lado y saludarlo con rapidez, o simplemente pasar a su lado ignorándolo. Era un fantasma, ¿no? se supone que no se veían y punto.

Estaba a punto de elegir esa última opción cuando el chico comenzó a desvanecersa del lugar en el que se encontraba, difuminando lentamente su silueta hasta desaparecer por completo.
Bell se preguntó durante unos instantes qué habría sido de él, cuando el joven volvió a aparecer ahora a su lado y repentinamente, haciendo que un grito agudo y con un cierto matiz musical se escapara de la garganta de la chica.

-¡Eres idiota!-gritó ésta, mientras fulminaba al joven con una mirada de odio que, a pesar de usarla pocas veces, le salía a la perfección. Seguí sin comprender del todo por qué el fantasmita era tan insoportable, particularmente con ella-¿Tu atrayente presencia? Ni siquiera tienes presencia, estás muerto-añadió, con un tono mordaz muy poco habitual en ella. Lo que había dicho no era del todo cierto, el joven tenía presencia, y mucha, pero sabía que eso le dolería.

por **Marc Hollow** Mar Dic 29, 2009 12:51 am

Si hubiera tenido la oportunidad de reírse por aquella broma que pretendía ser cordial, lo hubiera hecho encantado, sin embargo la reacción tan hostil de la hada había sido lo suficiente exagerada y mal hablada como para que se desconcertara por ella. Se alejó levemente de ella, al fin y al cabo parecía que no era bienvenido, mas aun así no dejaba de mirarle con aquel interrogante en su rostro, interrogante que desapareció dejando paso a la sorpresa y posteriormente la dolencia cuando Bell lo apremió con tales hirientes palabras. Lo que había llevado a la ‘’alegre’’ hada a hablarle de aquella manera era un misterio para Marc que le hubiera gustado resolver, sin embargo ahora se encontraba en el dilema de que decirle a aquella joven que había intentado y conseguido hacer mella en él, teniendo en cuenta que su desinteresando y caballeroso carácter le impedían contestarle de la misma manera.

- Valla, he de decir que eso ha sido todo un latigazo – Le dijo con completa sinceridad acompañado de un rostro no muy optimista, y sin embargo, una pequeña sonrisa cordial con un toque de su indiscutible ironía hicieron apareció en él – Y sin embargo, yo me refería a la presencia que te hace suspirar en las noches por mi – Le contestó, a sabiendas de que esa era la mentira más grande del mundo y la peor respuesta que se le podía ocurrir, pero con un poco de suerte, dejaría atrás aquel mal sabor de boca que le había dejado Bell.

por **Bell Phoenyx** Mar Dic 29, 2009 1:16 am

Bell observó con atención el pálido rostro del joven, que al escuchar sus palabras pasó por varias fases a una velocidad de vértigo. Diversión, desconcierto, duda, y finalmente dolor.
Por extraño que pareciera la chica no sintió placer alguno al notar que sus duras palabras habían afectado al fantasma. La hadita odiaba hacerle daño a la gente, por mucho que sus palabras mordaces fueran dirigidas a un fantasma que le hacía la vida imposible a su mejor amiga.

Abrió la boca en un acto reflejo para pedirle perdón, pero la cerró casi al instante, recordándose a si misma que ese tipo, a pesar de que a ella no le había hecho nada malo, pretendía hacerle daño a Berry. Además el hecho de que el chico se la tuviera jurada a su amiga no era el único motivo que hacía que Bell no lo soportara. Su ego, sin duda lo más notorio del carácter del fantasma, era algo que ella no podía soportar. Simplemente era incapaz de aguantar a las personas que se comportaban como si fuesen perfectos. Nadie lo era.

No dejaban de sorprenderle los exquisitos modales del chico, su excesiva cordialidad a pesar de cómo ella lo había tratado. Eso solo hacía que Bell se sintiera muchísimo peor por haberle hablado de esa manera.
La joven volvió a fijar su mirada en el rostro marmóreo del joven, con una expresión mucho más tranquila ahora.
-¿Suspirar por tí?-la ironía de su voz suave era más que evidente. Eso precisamente era lo que menos soportaba de él-Tengo cosas mejores que hacer por las noches que pensar en ti. Siento decepcionerte.

por **Marc Hollow** Miér Dic 30, 2009 8:18 am

Observaba apacible a la joven rubia, quien parecía llevar una discusión mental bastante curiosa a su buen ver y que como fin desconocido le habían hecho suavizar aquella expresión tan hostil de su rostro, lo que supuso, quizás equivocadamente, que se había hecho la paz entre ellos, por lo que sonrió por tal suceso y al terminar de escuchar lo que la chica le estaba diciendo. Un suspiro largo y que quería parecer doliente salió de su boca, o al menos una imitación de lo que muchos años atrás sería un suspiro por su parte, para después volver a voltear hacia Bell – Entiendo.. la vida en ocasiones es así de injusta – Le dijo, como si su rechazo le hubiera dolido.

- Aunque evidentemente.. yo estoy muerto – Terminó riendo suavemente por aquel chiste privado y que suponía la chica entendería sin la necesidad de una elaborada explicación. – Pero aún así.. me intriga el honor de tu presencia. ¿Qué es lo que te trae por esta desolada playa? Dicen por ahí que no es la más agradable de ver – Preguntó después de un pequeño lapsus de silencio en un trato cordial del que dudaba fuera correspondido, pero bien decían los dichos de que, si uno no apuesta, no ganaría nunca – Claro.. si es que se me permite la curiosidad

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por **Bell Phoenyx** Miér Dic 30, 2009 7:00 pm

La chica escuchó con indiferencia y mientras examinaba las rocas que sus pies no llegaban a rozar al fantasma, que fingió con gran maestría dolor por su rechazo. Tal vez en otra circunstancia le hubiese parecido gracioso, e incluso hubiese seguido su juego con alguna tontería, pero su relación con él era demasiado tensa como para hacer algo de eso por el momento.
A pesar de ello no pudo evitar que una risita escapara sin permiso de sus labios al escuchar el extraño chiste del chico. Sin duda debía tener un gran sentido del humor para bromear respecto a su propia muerte.

Volvió a fijar la mirada de sus ojos rasgados en el chico cuando éste preguntó por el motivo de su presencia allí. Era una buena pregunta que ni siquiera ella podía responder con exactitud.
-A decir verdad es algo que ni yo misma se. Supongo que me apetecía relajarme un poco, disfrutar de la tranquilidad. Había pensado en ir a la otra playa, pero a pesar del día tan horrible que hace está abrrotada como de costumbre. Supuse que aquí se estaría mejor, si conseguía no abrirme la cabeza-Bell se explicó con total tranquilidad, en un tono de voz suave y calmado acompañado de una leve sonrisa ante sus últimas palabras. Era de todos conocido que la hadita podía llegar a ser realmente patosa.

Spoiler:

por **Marc Hollow** Jue Dic 31, 2009 10:11 am

Como si el mundo quisiera estar en su contra aquel desolado día se equivocaba en cada uno de sus pensamientos respecto a la hada que sin quererlo le estaba acompañando. Dejó de mirarla para dedicarse a observar superficialmente el paisaje que se levantaba imponente ante ellos, podía observar que las rocas salían amenazantes, afiladas y desgarrantes de las aguas, que dominaban a extensas aquella playa y que parecían querer llevarse a alguien con sus fauces, fue cuando entendió aquella última frase de la rubia sobre la posible desgracia de abrirse la rostro con ellas. Era una forma de entender por qué estaba vacío aquel lugar, desde que él había decidido pasar aquella tarde en Rock Bleach lo último por lo que se había preocupado era por el infortunio de salir mal parado con aquel desastroso relieve.

Asintió con su cabeza ante lo dicho por la chica, volviendo a prestarle su atención tras no haber estado muy atento a ella por unos instantes – Entiendo – Se limitó a contestar como si no fuera una obviedad. Podía sentir que el tenso ambiente que hace unos minutos atrás se había inculcado caprichoso entre ellos, empezaba a desaparecer en apariencia, como si se tratara de una especie de prorroga entre dos bandos enemigos. Un pequeña y casi efímera sonrisa hizo aparición en su rostro, mirando de reojo a Bell - ¿Y crees que mi ‘’no presencia’’ supone un impedimento para que estés mejor? – Preguntó con casi curiosidad y resaltando un poco, con un tinte de diversión en su voz, la no presencia que para la hadita tenía.

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por **Bell Phoenyx** Jue Dic 31, 2009 7:20 pm

A la chica no se le pasó por alto que el fantasma examinaba el terreno que los rodeaba, repasando con la mirada las rocas afiladas y rebaladizas de la playa en la que se encontraban. Por supuesto, el no debía preocuparse por ello, el ser incorpóreo sin ninguna duda tenía sus ventajas.
Bell era perfectamente consciente de que si no hubiese sido por sus alas y por el hecho de que pocas veces se desplazaba andando en lugar de levitar unos centímetro sobre el suelo, ya estaría haciéndole compañía a Marc en su eterna muerte.

-Supongo que tú no tendrás que preocuparte mucho por el relieve-contestó, con un atisbo de sonrisa en su rostro.
Ciertamente el ambiente entre ambos se había relajado un poco, y Bell se preguntó si en el hipotético caso de que Marc no intentase matar a su mejor amiga podrían llevarse bien. También estaba el tema de su ego, pero había que reconocer que el fantasma tenía sus motivos para creérselo y no parecía ser tan insopotable como en un principio pensaba. De hecho, le gustaba contestar a sus estupideces, a veces también le apetecía ser un poco "mala" con alguien, y el fantasma era un buen blanco para ello.
Observó de reojo al chico, captando una leve sonrisa en su rostro de mármol-Depende de si tu "no presencia" se va a comportar o no.

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por **Marc Hollow** Jue Dic 31, 2009 8:24 pm

Negó con la cabeza ante la conclusión acertada de ella sobre la poca preocupación que debía de tener con aquellos relieves tan poco actos para seres como los humanos o cualquiera que simplemente le gustara jugar entre rocas, aunque suponía que ese último entretenimiento en aquella playa era lo último que haría alguien con más de tres dedos de frente, suponía. Aquella sonrisa que en un momento había sido tan efímera como lo atisbo del sol aquel día, se ensanchó sin más ante la respuesta de la chica que no le había ofrecido una contesta pesimista, más bien llegaba a ser cordial.

- Me ofendes hada.. – Le dijo moviéndose lo suficiente por el aire para dejar de estar a su lado y posicionarse frente a ella, pudiéndola ver mejor desde aquel ángulo – Seré todo un caballero – Terminó como si fuera lo normal en cada una de las tantas situaciones que deparaba la vida. Miró con curiosidad sus graciosas alas que no paraban de aletear, lo que le vino a la mente una pregunta de la mar interesante de que tan cómodo o no resultaban tales extremidades, por lo que no se guardó tal interés – Y.. dime.. ¿Qué tan cómodas son estas dos monadas? – Le preguntó señalando a su espalda.

por **Bell Phoenyx** Vie Ene 01, 2010 9:37 pm

Bell se fijó en como la sonrisa del fantasma se ensanchaba por algo que no acertaba a comprender del todo. Estaba a punto de preguntarle el motivo de su repentino buen humor cuando el chico se movió hasta quedar frente a ella, observándola con curiosidad.
-¿Un caballero?-repitió sus palabras con un tono irónico que expresaba a la perfección lo mucho de dudaba acerca de su actitud caballerosa, por mucho que el fantasmita se esforzara en parecerlo.

Se giró un poco hacia atrás intentando descubrir qué provocaba la curiosidad que podía distinguir en el rostro del fantasma, sin demasiado éxito. Volvió a mirar al chico con una ceja alzada a modo de pregunta, que quedó respondida el escucharlo. Sus alas.
Bell adoraba sus alas. Gracias a ellas podía volar, y sobre todo, equilibrarse. Además le encantaba que las acariciasen, aunque eso solo lo sabían Nyx y Berry ya que el resto del mundo no solía acercarse a ellas. Parecían tan delicadas que temían romperlas, algo completamente incorrecto.
-Son una parte más de mi, no podría vivir sin ellas-le explicó al chico, sonriendo con tranquilidad-Incluso si no vuelo me ayudan a equilibrarme, gracias a ellas no estoy haciendote compañía entre los muertos.

por **Marc Hollow** Sáb Ene 02, 2010 12:59 am

Rió suavemente ante su irónica pregunta, sin embargo ahí quedó todo respecto a ella, ignorando el contestar algo que seguramente iba a ser contradicho con el mejor de los tonos más Bell que podría. Mas el comportamiento de la hada, ese que resultaba ser confundido ante la curiosidad que él aparentaba para con sus alas, lo hicieron reír libremente y con total naturalidad, bastante ingenua y cómica resultaba la joven Bell con aquel gesto que sin lugar a dudas no había sido realizado para que se riera. La posterior sonrisa de la chica calmaron aquella gracia que encontraba al verla, asintió con su cabeza jovial – No tienes nada que envidiar – Le comentó ante sus últimas palabras que hacía alusión a su vida como fantasma.

La rodeó quedando detrás de ella aun curioso por aquellas alas, llevó su mano derecha hacia una de ellas, traspasándolas varias veces debido a su revoloteo, bufando por ello, no podía tocarlas. Se le hizo gracioso traspasar a Bell y, quizás con la noción de que eso la iba a enojar, lo hizo deliberadamente. – Interesantes – Le comentó mientras volvía a su posición anterior, frente a ella - ¿Y no cansa el mantenerse en el aire todo el rato? – Le preguntó buscando con su mirada algún lugar que resultara cómodo, o al menos, pasable y no mortífero.

por **Bell Phoenyx** Sáb Ene 02, 2010 5:02 am

En el rostro angelical de Bell se formaron automáticamente unas arrugas cuando frunció el ceño al escuchar al fantasmita riéndose de ella. Tal vez el estar muerto te convirtiera en un ser de inteligencia superior, pero ella todavía no leia mentes. Si el chico hubiese tenido un cuerpo sobre el que hacer algo habría intentado clavarle las uñas o algo asi, pero su incorporeidad se lo impedía, al igual que impedía que el chico le tocase las alas. Una idea que a él parecía divertirle sobremanera pero cuya diversión la hadita no veía por ninguna parte.

-¿Quieres dejar de hacer tonterías?-le preguntó. Obviamente era una pregunta retórica, y estaba segura de si no le hacía caso sería deliberadamente y no por no haberla comprendido.
Lo fulminó con la mirada cuando volvió a colocerse frente a ella y acto segido siguió su mirada, que parecía buscar algo.
-No, no peso mucho-le respondió, algo sorprendida por su comentario. Nunca se le había ocurrido pararse a reflexionar sobre ello. Para ella volar era como andar. Si andabas mucho tiempo, te cansabas. Si volabas mucho tiempo, tambien.

por **Marc Hollow** Dom Ene 03, 2010 7:18 pm

Ver a Bell con aquel rostro, enfadado, fruncido, eran motivos suficientes para reírse de nuevo, pero en contra de ese pequeño deseo no lo hizo, supo aguantarse esas ganas. Cuando escuchó su pregunta para que para de hacer aquellas pequeñas cosas le sonrió medio divertido medio disculpándose llevándose distraído su mando izquierda a la nuca. – Oh venga.. si es entretenido – Se excusó mientras llevaba su mano a la cara de la joven, con los dedos índice y corazón separado y los demás cerrados en un puño – Parece que te voy a atravesar los ojos..- Murmuró mientras se acercaba peligrosamente a ellos. - Pero.. Bualá. No – Dijo riendo suavemente mientras atravesaba sus orbes como si no hubiera nada - ¿A que es entretenido? – Le preguntó dejando atrás ya su faceta de jugar con la hada y retomando su posición al ver que no parecía estar con su mismo humor.

Cuando contestó que no pesaba mucho enarcó una ceja para darle un rápido vistazo a u cuerpo, aunque llegó a la misma conclusión de que no sabría que tanto podría pesar un cuerpo de esas condiciones, por lo que dejo que sus ojos volvieran nuevamente al rostro de la chica – Yo tampoco – Dijo sonriendo y bromeando sobre su propio peso.

por **Bell Phoenyx** Dom Ene 03, 2010 9:55 pm

Su expresión de enfado aumentó considerablemente cuando el estúpido fantasmita se dedicó a intentar meterle los dedos en los ojos. Claro que si no hubiese sido fantasma habría sido mucho peor, pero aun así seguía apeteciéndole matarlo. Otra vez.
-Luego soy yo la infantil-le dijo, con una mueca de desesperación en el rostro mientras el chico decía estupideces al ritmo que hacía el tonto con los dedos. Y ella que pensaba que el chico era soportable... ya veía que no por mucho tiempo.

Observó como el chico miraba su cuerpo, supuso que intentando averiguar lo que podía pesar ella. Obviamente no mucho, como demostraba su corta estatura. Al fantasmita le llegaba por la altura del pecho, y eso que estaba levitando unos centímetros.
-Obviamente-le respondió, observándolo tambien. Como fantasma técnicamente no pesaba nada, aunque suponía que como humano no habría sido tan ligaro, a juzgar por su aparente complexión.

por **Marc Hollow** Lun Ene 04, 2010 12:43 am

La expresión con la que Bell le deleitaban le hicieron reír otra vez, muy levemente en esta ocasión, pero que no había podido evitar hacerlo. Por supuesto, dejó de lado las tonterías antes de que el enfado de la hada fuera monumental, poco a apetecible y que, en la peor de las circunstancias, lo dejara solo, por extraño que lo pareciera, quería alargar el rato aquel en su compaña. Sonrió nuevamente ante su comentario de obviedad, aunque por supuesto, había sido un pequeño chiste en el que, como toda la situación en general, Bell no veía la diversión, un motivo más que suficiente para dejar atrás esa faceta de echar bromas que se le había antojado.

La miró por un momento, sin saber que decir, aunque dudando sobre un tema que, ahora que se daba cuenta, nunca había hablado con ella, ni mencionado nunca sobre él pero del que sabía estaba más que enterada. Se trataba, aunque era obvio para mucha gente, pero de lo que é tampoco estaba muy enterado, que la hada verde era muy amiga de Berry, único motivo por el cual seguía vagabundeando por aquellos parajes humanos. Finalmente, a vistas de que no parecía haber más tema que los entretuviera por un rato más, prefirió sacar ese - ¿Qué tal esta mi queridísima Berry? – Preguntó como quien no quiere la cosa y como si fuera lo más normal del mundo, sin tener en cuenta que quería matar a su queridísima bruja.

por **Bell Phoenyx** Mar Ene 05, 2010 3:04 am

Bell todavía seguía sin comprender a ciencia cierta qué tenía el fantasma que disipaba su habitual buen humor sin el más mínimo esfuerzo, pero era un don único y exclusivo de él. En su presencia su carácter era más parecido al de la asquerosa de su hermana que al suyo propio.
Y eso no mejoraba si a él le daba por sacar como tema de conversación el peor que podría haber elegido. ¿Qué necesidad tenía de nombrar a Berry ahora que estaba empezando a olvidar que quería matarla?
Estaba intentando aguantarlo con toda su voluntad, pero a este paso iba a durar bien poco hablando con él, por mucho empeño que pusiera en tener paciencia.

-Oh, está genial. Muerta de miedo porque un fantasma acosador, salidorro, egocéntrico e insoportable quiere matarla. No se si te suena la historia-clavó su mirada en la de él, con una expresión cínica e irónica impropia de ella, al tiempo que sus manos se crispaban. Si tal solo pudiese tocarlo... lo malo de cabrearte con un fantasma era que no podías hacerla nada. De hecho podía estar todo el día dándote el coñazo, ni siquiera podías encnerrarte en algún sitio para ignorarlo-Por cierto, ¿los fantasmas siempre sois incorpóreos o alguna vez tendré el placer de poder tocarte?

por **Marc Hollow** Mar Ene 05, 2010 5:03 pm

No pudo evitar sonreír de medio lado ante la sutil respuesta que le ofrecía la hada, viendo como nuevamente parecía haber regresado aquel ambiente del principio que no se caracterizaba especialmente por ser una maravilla – Así que.. es ese el tema que te molesta.. – Aunque lo dijo en alto, era más bien una conclusión para si mismo, llevándose una mano en la barbilla, pensando. No entendía realmente su mal humor, al fin y al cabo era a Berry a quien quería quitarle la vida, no a ella, y aunque su cario como amiga fuera muy grande, últimamente no había visto a la bruja por ninguna parte, hacía tiempo, a decir verdad, que él no había intentado nada.

- No creo que mi queridísima bruja este tan traumada – Comentó, riendo suavemente – Su fantasma preferido no ha hecho nada desde hace.. tiempo – Comentó, no viendo como ella la parte de acosador y salidorro en la historia, egocéntrico, pasable, pero ¿insoportable? Arrugó el ceño en desacuerdo con aquello, pero lejos de decir nada, se volvió a fijar en la hada que en esos momentos no le miraba muy bien – Aunque a decir verdad.. debería irle a visitar pronto. No vaya a ser que se le olvide, que estoy para ella – Murmuró, a sabiendas de que eso seguramente crisparía aún más a su acompañante.

- ¿Alguna vez has visto un fantasma que no traspase paredes? – Le respondió con otra pregunta, esperando que viera lo estúpido, aunque acertado para su sorpresa, que había sido su cuestión.

por **Bell Phoenyx** Mar Ene 05, 2010 8:52 pm

Asi que el fantasma no tenía todavía claro cuál era el motivo de su particular enfado con el. Claramente no dabía ser tan listo como pretendía, pues la hadita opinaba que era más que obvio.
-¿Qué te creias que me molestaba de ti? ¿Tu ropa mojada?-lo observó como si fuera un crío pequeño al que le estuviera diciendo algo completamente obvio. Aunque la parte de la obviedad era completamente cierta. La de la ropa no, de hecho su ropa destrozada y empapada junto con su herida le daban un toque rebelde muy...sexy.

Un bufido de exhasperación salió de sus labios al escuchar las palabras del fantasmita que, decididamente, era tonto. O eso o meterse con ella le producía un inexplicable placer.
-¿Dices todo eso solo porque eres estúpido o tienes una especial afición por tocarme las narices?-le preguntó, alzando una ceja con curiosidad. Podía parecer una pregunta retórica pero era algo que la intigaba realmente.

-Si, se que hay fantasmas que pueden hacerlo porque...-se calló antes de terminar la frase. No era algo que le hiciera una excesiva gracia recordar en estor momentos.

por **Marc Hollow** Mar Ene 05, 2010 9:53 pm

Ante su pregunta y mención de su ropa, no evitó darle una mirada a esta, Marc cuando estaba de forma incorpórea, que era siempre la mayoría de horas de un día, no le gustaba llamar a lo que veían los demás de su apariencia como ropa, al fin y al cabo la vestimenta se podía quitar y colocar a gusto de la persona, aquello que llevaba no. Simplemente era una parte más de él. Aunque por un momento había puesto una mueca de disgusto, fue tan momentánea como su rápida supervisión, volviendo nuevamente sus ojos hacia la chica. – Pensé que formaba parte de tu humor matutino – Respondió a su pregunta, pues realmente Bell no le era tan conocida como lo podía ser Berry, las tantas veces que había tenido la oportunidad de verla siempre había sido ante un trato que distaba mucho de ser amable, por lo que había intentado llevar una conversación que dejara atrás las desconocidas diferencias. Sin embargo ahora que sabía que se trata exclusivamente por su pequeño asunto pendiente con la bruja, no le importaba en absoluto la enemistad de Bell, ya que, llevar una buena relación con ella significaría, a la hora de cumplir con lo debido, un posible impedimento.

Ante su pregunta, cual no ignoraría, dudó en que contestar. Realmente lo había dicho con intención de fastidiar un rato a la pequeña Hada, sin embargo, la idea de ir a ‘’ver’’ a Berry tras tanto tiempo de ausencia le resultaba entre muchas cosas, tentadora. Sabía que después de eso todo terminaría, y aunque no tenía prisa alguna por ello, el hecho de que el tiempo pasara de una forma tan desoladora para él y que el recuerdo de su amada estuviera incrustado en el rostro de otra mujer, eran motivos suficientes para que la idea de llevar a cabo su cometido no resultara tan descabellada. – Si la estupidez está unida con el motivo por el que me mantengo aquí, sí, soy realmente estúpido – Le respondió finalmente dándole el gusto a la chica de su contesta, cual él no tildaba de estúpida, pero que poco iba a contradecirle a la chica. A diferencia de lo que creía sobre ella, Marc no tenía el afán de buscar discusiones por el gusto de discutir, la verdad era que pocas veces se le veía haciéndolo.

- Porque.. ?? – Preguntó curioso al ver que su frase quedaba a medias, inevitable para él no sentirse interesado de lo que iba a decir la joven, pero al ver que esta parecía no querer contarlo, desistió de la espera. – Si, a decir verdad hay momentos en los que podemos ser.. un poco más humanos – Le respondió finalmente a su cuestión - ¿Por qué la curiosidad? – Preguntó el también, sin saber exactamente a qué se debía aquella curiosidad por parte de la chica.

por **Bell Phoenyx** Jue Ene 07, 2010 10:42 pm

Una expresión de desconcierto y algo de diversión apareció en el rostro de Bell cuando el chico observó su propia ropa por un motivo que ella no acetaba a comprender. Según tenía entendido los fantasmas siempre se aparecían con la ropa del momento de su muerte, por lo que Marc debía saber con total exactitud lo que llevaba puesto sin necesidad de mirarlo. No tenía las facultades mentales de el fantasma como su mayor cualidad, pero creía que hasta ahí sería capaz de llegar.

Pensó que sería mejor dejar el tema, ya que la moda fantasmal no era una de sus mayores aficiones. En su lugar observó a Marc con desconcierto cuando éste dijo lo de su mal humor. ¿Mal humor? Si ella prácticamente no tenía de eso. De hecho, que ella recordara solo se había enfadado seriamente un par de veces a lo largo de su vida, y solía ser tan alegre que en ocasiones llegaba a parecer infantil.
-No tengo mal humor matutino. De hecho estaba feliz hasta que me he cruzado contigo-esta vez no pretendía meterse con él ni nada por el estilo, simplemente le explicó algo que para ella era obvio todavía con una ligera sorpresa porque él hubiera pensado eso.

Su expresión de desconcierto no desapareció al escuchar la respuesta del chico acerca de su estupidez, la cual a falta de conocer el razonamiento que había seguido para llegar a ella, no entendió. Se preguntaba si alguna vez llegaría a comprender la mentalidad de Hollow, aunque no lo veía demasiado posible. Estuvo a punto de soltarle un comentario bastante borde, pero decidió dejarlo estar. Realmente no se conocía a si misma desde que había comenzado a hablar con él hacía un rato.

Negó con la cabeza algo distraida, recordando uno de los peores momentos de su vida. Todavía no entendía qué había llevado a un fantasma sádico y horrible a atacarla, pero la cicatriz que cruzaba toda su ala izquiera en un apenas imperceptible recorrido zizagueante le servía de advertencia para tener muchísimo cuidado en las noches de luna llena.
Se giró para darle la espalda a Marc y que pudiese verla, suponiendo que si se fijaba la distinguiría.
-En realidad me desespera hablar con alguien a quien no puedo tocar-le respondió todavía de espaldas a él-aunque si no eres un fantasma de los tranquilitos mejor que te quedes así.

por **Marc Hollow** Vie Ene 08, 2010 2:46 pm

Tras dejar atrás su reconocimiento de la ropa se fijó en la expresión de desconcierto que figuraba en el rostro de Bell, haciéndole reír muy levemente y para él, realmente se veía graciosa luciendo ese gesto. Su diversión cesó cuando la hada volvió a hablar para informarle como es que era su humor – Valla.. gracias por sacarme de mi error. Ahora me siento mucho mejor – Dijo, con una brizna de ironía en su voz, no es que si te dijeran que eres un factor importante para hacer cambiar el humor de una persona de forma tan considerable, fuera precisamente un piropo y menos él que, en general, gustaba de llevar una relación de cordialidad.

Hubo un pequeño silencio que a el fantasma se le antojó incómodo, y no es porque le disgustara tal hecho, él estaba acostumbrado a pasar la mayor parte de su tiempo en un silencio acompañado por la mera soledad y, aun así, disfrutaba bastante de él. Sin embargo cuando se trataba de compartir la ausencia de sonido le resultaba bastante desagradable, y más aún cuando quien te acompañaba era alguien extrovertido. ¿Por qué se callaba? Fue entonces cuando ella negó con su cabeza y él salió de aquel pequeño ensimismamiento con sus pensamientos, observando la extraña expresión que lucía su rostro - ¿Estás bien? – Preguntó para después ver como esta le daba la espalda, desconcertándolo realmente. ¿Había dicho algo malo? ¿Estaba enojada? Fue entonces cuando se fijó en las alas de la chica otra vez, pero a diferencia de la anterior no le pasó desapercibida aquella irregular cicatriz que la recorría - ¿Un fantasma?.. – Preguntó en un murmullo acercándose a ella para llevar su mano al ala, buscando recorrer el largo de aquella secuela con sus dedos, mas simplemente volvió a traspasarla como si no hubiera nada, lo que le hizo fruncir su ceño con disgusto.

Dudó bastante al escuchar sus palabras si dejar por un momento de ser incorpóreo, pues era un privilegio que solo le duraba poco tiempo al día y era sabido por algunas cuál era su forma de aprovecharlo, se preguntaba si quizás, sería desperdiciar aquel momento del día, al fin y al cabo no creía que la joven entendiera de qué forma era el tacto anhelante para un fantasma. Sin embargo, la debilidad de Marc eran las féminas y, en cierto modo, Bell le había dado a entender que lo prefería de carne y hueso, lo que le llevó finalmente a darle el capricho, aún sin saber realmente por qué. Descendió hasta colocarse por encima de alguna roca que no fuera capaz de volverlo incorpóreo de nuevo, dejándose caer en ella con todo el peso del cuerpo, pues ahora, como humano, si podía notar la diferencia de carga que tenía que soportar aunque para los ojos de los demás siguiera siendo igual – Como comprenderás, no puedo volar – Le dijo con gracia mirando hacia ella ha varios metros por encima de él, esperando que se dignara a hacerle compañía.

por **Bell Phoenyx** Vie Ene 08, 2010 9:18 pm

Otra vez volvió a sentirse fatal al notar la ironía de la voz del fantasma. Suponía que enterarte de que ponías de mal humor a las personas no debía ser muy agradable, y ella odiaba no ser agradable con cualquiera. No le gustaba en absoluto hacer que nadie se sintiera mal, aunque se lo mereciese.

Escuchó la pregunta del chico y asintió con la cabeza sin decir una palabra, mientras esperaba a que él detectase su cicatriz. Aguardó unos minutos de espaldas a él, hasta que su segunda pregunta le dio a entender que la había visto. Después se giró para mirarlo con una expresión fría, indiferente, y con un matiz de tristeza.
-Si, digamos que hay fantasmas cuyas aficiones en las noches de luna llena no son tan agradables como las tuyas-todo el mundo que había oido hablar de él sabía qué era lo que más le gustaba hacer a Marc en los momentos que podía estar en una forma física, por lo que supuso que no se molestaría por el comentario.

Bell observó con curiosidad cómo el chico descendía hasta una roca que parecía más o menos segura, y sus palabras le dieron a entender que, por extraño que pudiese parecer, había decidido complacer sus deseos. No dejaba de sorprenderle que él le hubiese hecho caso y ahora fuese tangible, por lo que descendió a su lado con un batir suave de sus alas. Dudó unos instantes a la hora de posarse en tierra, pues aunque suponía que a Marc no le importaría demasiado volver a su forma fantasmal, ella no estaba dispuesta a pasar por ello. Al menos no tan pronto.
Tras buscar un hueco para sus pies en la roca, frente al chico, dejó de batir sus alas hasta dejar caer su ligero peso en el suelo medianamente firme. Alzó su mirada del suelo a su compañero, y con una mirada curiosa levantó una mano para tocar su hombro y averiguar si eran ciertas sus suposiciones. Sus dedos tocaron la tela de su camisa al igual que hubiesen sido capaces de tocar la ropa de cualquier persona viva. Movió un poco más su mano hasta llegar a la piel de su cuello para comprobar si, efectivamente, él también era tangible. A pesar de estar frío era perfectamente normal. Increible.
-Nunca había tenido el placer de tocar a un fantasma cuando no es fantasma-compuso una sonrisa divertida, todavía sin apartar su mano de él. Pensó que tal vez no fuese agradable para él, por lo que decidió preguntar-¿Te molesto? Eres...curioso.

por **Marc Hollow** Vie Ene 08, 2010 10:42 pm

Realmente se sentía indeciso cuando Bell se dio la vuelta para encararle nuevamente, su mirada, extraña de deducir para él, tenía una brizna de tristeza que acompañaba con aquellas palabras, recuerdos no muy agradables, supuso. Alzó su ceja derecha al escuchar aquella referencia de cómo pasaba él sus noche de luna llena, mas no comentó nada hasta no descender hacia las rocas. - ¿Qué ocurrió?.. Si me permites tal curiosidad.. – Le preguntó mientras observaba como esta descendía con tanta sutileza y delicadeza hacia el frente de él, lo que le hizo dar un pequeño paso retrocediendo con el objetivo de que la chica tuviera más espacio, si es que lo necesitaba.

Sin embargo le pilló desprevenido el drástico cambio de humor que presentaba la hada que, con curiosidad, se había tomado la libertad de dedicarse a tocar su hombro. Giró su rostro para ver como palpaba por encima de su camisa para cerciorarse de que debajo de ella había piel, así que lo que en principio había sido confusión pasó a causarle gracia. Volvió su rostro hacia Bell mientras esta pasaba a su cuello con sus dedos, haciendo ciertamente cosquillas, causándole sin querer un pequeño estremecimiento, mas seguía mirándole con aquel atisbo de diversión mezclado con extrañeza en su rostro – Valla.. me alegro ser tu primera vez.. – Comentó con gracia y riendo levemente por ello, para después escuchar la pregunta y opinión de la chica. A decir verdad se sentía un bicho raro que levantaba extrañamente el interés de la joven, aunque quizás fuera un bicho raro no entendía su fascinación, no recordaba que alguien anteriormente se hubiera encaprichado de esa manera – Para nada.. soy todo tuyo – Le dio la libertad para hacer 'lo que quisiera'' con gracia, al fin y al cabo, quizás así podría él toquetear sus alas que seguían antojándoseles curiosas y apetecibles.

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